ISABIAL, el Hospital Dr. Balmis y la UA identifican la capacidad antitumoral de un pigmento presente en las salinas de Santa Pola frente al cáncer de mama
En el estudio participan Gloria Peiró Cabrera y Yoel Genaro Montoyo-Pujol del Instituto de Investigación Sanitaria y Biomédica de Alicante y el Hospital Dr. Balmis
El resultado del trabajo ha sido publicado en la prestigiosa revista Nature Scientific Reports
Alicante (28.06.23). El Instituto de Investigación Sanitaria y Biomédica de Alicante (ISABIAL) y el Hospital Dr. Balmis han colaborado con el grupo de investigación de Bioquímica Aplicada de la Universidad de Alicante (UA) en la identificación de la capacidad antineoplásica de la bacteriorruberina, un pigmento presente en las salinas de Santa Pola. Este pigmento lo producen ciertos microorganismos, las ‘arqueas halofílicas’, con el fin de protegerse del sol y su capacidad antitumoral ha sido ensayada en varios subtipos de cáncer de mama.
La investigadora principal de este estudio es Rosa María Martínez-Espinosa, catedrática de Bioquímica y Biología Molecular de la UA, que explica que este importante hallazgo, que ha sido publicado en la prestigiosa revista de Nature Scientific Reports, se inició con el desarrollo de la tesis doctoral de Micaela Giani. En ella, la ya doctora demostró a través de ensayos ‘in vitro’ la actividad antioxidante del pigmento y su efecto en enzimas (biocatalizadores) que están implicadas en patologías como la diabetes o el síndrome metabólico.
“Tras dar a conocer estos resultados, fue entonces cuando nos planteamos qué pasaría si añadíamos el pigmento a las células cancerígenas basándonos en la hipótesis de que, siendo un pigmento con una actividad antioxidante casi 300 veces superior a la de otros antioxidantes, podría limitar la capacidad de crecer y reproducirse de estas células”, explica Rosa María Martínez-Espinosa.
En esta segunda fase, el grupo de investigación de la UA ha trabajado en colaboración con la doctora Gloria Peiró, patólogo del Hospital Dr. Balmis y profesora del Departamento de Biotecnología de la UA, así como con Yoel Genaro Montoyo-Pujol, doctor en Ciencias Experimentales y Biosanitarias y coordinador de ensayos clínicos en el Servicio de Oncología Médica del Hospital Dr. Balmis, ambos investigadores del Grupo de Cáncer de Mama e Inmunología de ISABIAL.
La doctora Gloria Peiró destaca que “gracias a esta colaboración entre ISABIAL, el Hospital Dr. Balmis y la UA, se pudo comprobar ‘in vitro’ el efecto de este pigmento en líneas celulares representativas de diferentes fenotipos intrínsecos de cáncer de mama y una línea de tejido mamario sano”.
El personal investigador de este estudio destaca que “hemos llegado a la conclusión de que, en determinadas dosis, el pigmento no causa ningún efecto dañino sobre las células sanas, pero sí limita la capacidad de crecimiento de las células neoplásicas”. En este sentido, el estudio “abre una puerta a la Biomedicina, al diseño de nuevas estrategias para luchar contra el cáncer basadas en el uso de compuestos naturales, que no son perjudiciales para el organismo”.
Las arqueas halofílicas son microorganismos extremófilos que requieren un ambiente hipersalino para prosperar, de forma que se hallan principalmente en las salinas costeras, salinas de interior o lagos hipersalados. Estos microorganismos sintetizan unos pigmentos carotenoides C50 raros llamado bacteriorruberina (BR) y sus derivados monoanhidrobacterioruberina (MABR) y bisanhidrobacterioruberina (BABR).
A partir de este descubrimiento, tal y como señalan los investigadores, son varias las fases que hay que desarrollar empezando por ampliar el estudio con líneas celulares diferentes de otro tipo de tumores, para continuar con los ensayos en muestras de tejido de biopsias o piezas quirúrgicas, con el fin de diseñar posibles protocolos de tratamiento usando este pigmento, y pasar después a estudios con animales antes de llegar a su uso clínico en pacientes.
Autor: José Antonio Más Cayuelas